Las asociaciones civiles de Coatzacoalcos que se desvivían por ayudar, ahora luchan por sobrevivir.
La pandemia de coronavirus frenó las contribuciones que recibían de la sociedad civil para atender a enfermos o personas en estado de vulnerabilidad.
El confinamiento social afectó los donativos altruistas, además de que las actividades programadas como colectas o rifas tuvieron que ser canceladas.
Pavel Marichal: El nacido en Coatza que trabaja en una vacuna para el coronavirus
Coronavirus alcanza a CEDH de Coatzacoalcos; mandan a todo el personal a cuarentena
Niños con cáncer en riesgo de recibir tratamiento
Casa de Amor para niños con Cáncer mantiene cerrado su albergue, informó su representante Monserrat González Serrano.
Agregó que también algunos padres de los menores se quedaron sin trabajo, por lo que se les complica acudir a las quimioterapias en el Hospital Regional, poniendo en riesgo su tratamiento.
“Los padres de algunos niños, no tenían como trabajos estables, esto nos pega a todos, el albergue no lo puedo tener abierto, sería incongruente porque nosotros estamos del lado de la salud, cuando estamos en resguardo, en cuarentena”, explicó.
Ejército de Salvación pide insumos
Ejército de Salvación casa hogar para niños abandonados o maltratados, no permite el acceso a sus instalaciones desde hace tres meses.
El mayor encargado del refugio, solicitó la donación de insumos para atender a los menores resguardados.
“Hemos estado un poco restringidos en muchas cosas, hay gente que ha tenido a bien ayudarnos pero desafortunadamente sabemos que la situación económica pues no es la mejor, han dejado de aportar algunas cosas, hemos estado pidiendo el apoyo con cloro, jabón, cubrebocas, gel antibacterial”, comentó.
Niños con discapacidad retrasan su aprendizaje
Por su parte Martha Laura Cortines Olmedo presidenta de la fundación Pasitos suspendió su atención educativa y de terapias con niños y jóvenes con alguna condición de discapacidad, retrasando el aprendizaje que ya habían obtenido.
Además se les ha complicado cumplir con los gastos de la casa que rentan.
“Les afecta en el área de aprendizaje y el área cognitiva, social, porque el aprendizaje que se iba aprendiendo pues se va a retrasar, en el área social hay algunos niños que se integraban a grupos, al manteneros aislados se van a atrasar nuevamente”, apuntó.
Estas tres organizaciones ya registraban menos donativos por la crisis económica e inseguridad de Coatzacoalcos, pues varias de las manos altruistas habían emigrado de la ciudad.